Una de las marcas de identidad de Nueva York es la mezcla de razas y culturas que podemos encontrar en sus calles.
Este carácter se ha forjado gracias a las sucesivas oleadas de inmigrantes que han llegado, y siguen haciéndolo a menor escasa, en busca de unas mejores oportunidades de vida.
Para tomar consciencia de la importancia que la inmigración ha tenido en una de la ciudades que mejor representan la búsqueda del llamado sueño americano, nada mejor que visitar dos lugares.
Nos ofrece varios recorridos que nos muestran con riguroso detalle cómo era la vida de los inmigrantes que llegaron a la ciudad durante el siglo XIX, mediante una fiel recreación del interior de varios de los apartamentos que ocuparon en el 97 de la calle Orchard, en el Lower East Side. Cuentan con una completa tienda, bien surtida de libros sobre el tema.
2.- La Isla de Ellis
El primer lugar del nuevo mundo que veían los que emigraban. Un apasionante recorrido, gracias al abundante material fotográfico y los numerosos objetos que integran sus fondos, a lo largo de las diferentes salas del complejo que nos muestra las condiciones de vida de los que llegaban y el trabajo de los que los recibían. La cara más dura de la emigración, pero también la esperanza que subyace detrás de ella.
Más información sobre Nueva York, en la colección de Guías personalizadas según el tipo de viaje a realizar, en estilo, con niños, como un sibarita…